Diferencias entre Suelo laminado y Tarima Flotante: cuál es mejor

Suelo laminado vs Tarima flotante

Confundir el suelo laminado y la tarima flotante es algo bastante normal, ya que se parecen mucho y sus características son similares. Pero estos dos tipos de suelo son muy distintos y cada uno de ellos tiene sus peculiaridades. En este artículo te hablamos de la diferencia entre suelo laminado y tarima flotante y cuál es el mejor para cada caso.

Estos dos tipos de suelo también suelen confundirse con el parquet, pero como ya sabrás, el parquet es un tipo de suelo que está formado por piezas de madera, no por laminado plástico o por tarima flotante.

¿Qué es mejor, el suelo laminado o la tarima flotante?

Empezaremos comentando los materiales de cada uno de los tipos de suelo de los que estamos hablando. Ambos se colocan para recubrir el suelo. En el caso de la tarima flotante, se hace con madera natural, y el suelo laminado es con materiales sintéticos que imita a la madera.

Con la tarima flotante logramos un suelo de madera natural de buena calidad que dura mucho más que el laminado. Además, si se realiza un correcto mantenimiento de la tarima flotante, esta lucirá perfecta durante mucho tiempo.

Cuando el suelo laminado se deteriora, se debe colocar un nuevo revestimiento, por el contrario, si la tarima flotante se desgasta se puede restaurar más fácilmente.

Otra de las diferencias más destacadas es el precio entre el suelo laminado y la tarima flotante. La mano de obra y el material de la tarima flotante de madera natural es mayor, pero a largo plazo, este tipo de suelo es más económico. Por otro lado, el suelo sintético tiene un precio más asequible, tiene una fácil colocación y se limpia más fácilmente.

Características del suelo laminado

A continuación, vamos a indicar cuáles son las principales características de los suelos laminados:

• Están hechos de materiales sintéticos y de poco espesor que no superan los 8 mm.
• Normalmente se utiliza alguna variedad de plástico para su realización.
• Su colocación es muy sencilla, ya que simplemente hay que apoyarla y encastrarlas unas con otras. No hace falta clavar ni pegar, ni siquiera atornillar.
• Deben ponerse sobre un suelo limpio y que esté nivelado. Y puede ser de madera, pero normalmente se coloca sobre una base de concreto.
• Una de las ventajas del suelo laminado es que puede colocarse en cualquier espacio sin ningún problema, ya que únicamente añade 8 mm de altura, y eso permite el movimiento de puertas sin que roce.

Características de la tarima flotante

Para que puedas tomar la mejor decisión, a continuación te explicaremos cuáles son las principales características de la tarima flotante.

• El material de las tarimas flotantes suelen ser maderas nobles las cuales soportan el tránsito con un desgaste mínimo.
• En el caso de las medidas de las tablas de una tarima flotante, estas suelen ser variadas, y el largo de la tabla se establece teniendo en cuenta el área que se quiere revestir.
• Una de las diferencias más destacadas de la tarima flotante y los suelos laminados es que la tarima no se coloca en el suelo directamente, sino que se hay que clavar o atornillar.
• Una vez se ha realizado la instalación se debe llevar a cabo un lijado que ayuda a eliminar las imperfecciones.

Otra recomendación es aplicar algún tipo de plastificante que ayuda a proteger la tarima flotante de madera del desgaste, esto ayuda a que la limpieza sea más sencilla.

Suelo laminado vs Tarima flotante

Estas son algunas de las principales diferencias entre el suelo laminado y la tarima flotante. Cada uno de ellos tiene sus ventajas y sus inconvenientes, pero la elección de uno u otro dependerá de las necesidades del lugar donde se coloca. Ambos son buenas opciones para colocar el suelo en una casa nueva o en una oficina.

¿Qué diferencia hay entre el parquet y la tarima flotante?

Si no tienes experiencia en el tema de los suelos, es fácil confundir estas dos opciones que te ofrece el mercado, pero echándoles un vistazo a sus características, notarás que son muy distintas. 

• La primera gran diferencia entre la tarima flotante y el parquet es que la primera puede estar elaborada con madera o con materiales que imitan a la madera. Mientras que el parquet sí está elaborado de tablas de madera natural de aproximadamente 1 cm de espesor.
• La tarima flotante se coloca sobre el suelo existente. Es decir que no hacen falta obras adicionales para retirarlo, lo que la hace más fácil y rápida de instalar. Por su parte, el parquet sustituye el suelo previo, por lo que hay que removerlo completamente. Esto implica mayor coste y mayor dificultad.
• La resistencia es un punto a favor del parquet. Esto se debe a que el núcleo de madera es más sólido, de modo que absorbe mejor los golpes y, por lo tanto, conserva por más tiempo sus características originales. La tarima flotante es más sensible, aunque con el cuidado y tratamiento adecuados también puede durar muchísimo tiempo.
• En cuanto al precio, la tarima flotante resulta más económica, pues sus materiales suelen ser menos costosos. El parquet, por su parte, está elaborado en maderas como el arce, el roble o el bambú, considerablemente más costosas.

¿Qué es más barato, suelo laminado o vinílico?

Tanto el suelo laminado como el vinílico son opciones más asequibles que, por ejemplo, el parquet. No obstante, existen diferencias en sus precios que pueden hacer decantarse por una u otra alternativa.

Los suelos laminados ofrecen precios bastante razonables. Las opciones más económicas pueden conseguirse en 6 euros por metro cuadrado, y las más costosas en 30 euros el m2. 

Por su parte, el rango de precios de los suelos de vinilo es de 5 a 60 euros el m2. Esto significa que, al momento de ir a comprar, es probable que te ahorres más dinero con un suelo laminado de alta calidad que con un vinílico de gama media o media-alta. 

¿Qué diferencia hay entre suelo laminado y parquet?

1. Las diferencias entre los suelos laminados y el parquet son bastante marcadas. La más significativa puede ser el precio. El parquet, al estar elaborado de madera pura, es más caro, incluso, que los laminados de alta gama. 
   Además, colocar un suelo laminado es más económico, al punto de que no se requiere de una gran experiencia, y podría hacerlo el mismo usuario. Mientras que el suelo de parquet conlleva más trabajo, tiempo, complicaciones, personal especializado, obras adicionales y, en consecuencia, mayores costes.
2. En lo que se refiere a la estética, hay una diferencia significativa, dado que la apariencia del parquet es incomparablemente más refinada y elegante. Estamos hablando de madera totalmente natural, que con un buen mantenimiento puede mantenerse hermosa por décadas.
   Ahora bien, esto no significa que los laminados vayan a deslucir los espacios, puesto que hay modelos de altísima calidad que pueden ofrecer una apariencia y calidez muy similar al parquet. Un punto positivo es que los laminados no pierden el color ni el aspecto.
3. El mantenimiento es otro rasgo diferenciador, y allí es donde los suelos laminados llevan la delantera. El parquet no solo requiere cuidado y mantenimiento constantes, sino que se deben emplear productos específicos que tienden a ser costosos. Se debe pulir con aceites especiales para mantener su apariencia intacta por más tiempo.
   Por su parte, si decides instalar un suelo laminado, podrás ahorrarte mucho tiempo y trabajo, además de dinero. Este material es resistente a golpes, manchas y rasguños. Es el más indicado si tu ritmo de vida es acelerado y simplemente no tienes tiempo para hacer un mantenimiento constante.

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